🎍El helecho y el bambú es una fábula que habla sobre la importancia de mantener la esperanza y la paciencia.
🙂Esta fábula nos habla de un hombre que pasaba por una mala racha y decidió darse por vencido, renunciando a su trabajo, a su relación y a su vida.
El hombre fue al bosque para hablar con un anciano que decían era muy sabio. Había caminado una media hora por el bosque cuando se encontró con ese anciano amable que lo saludó.Tenía una casa humilde y, al verlo, lo invitó a pasar para que tomaran té. En anciano notó la preocupación en su semblante y le preguntó qué le pasaba;
el hombre le relató sus desventuras, mientras el anciano lo escuchaba atenta y serenamente.
Cuando terminaron de tomar el té, el anciano lo invitó para que fuera a un esplendoroso solar que había en la parte trasera de la casa.
Allí estaban el helecho y el bambú, al lado de decenas de árboles. El anciano le pidió que observara ambas plantas y le dijo que tenía que contarle una historia.
Esto dijo el anciano: “Hace ocho años tomé unas semillas y planté el helecho y el bambú al mismo tiempo. Quería que ambas plantas crecieran en mi jardín porque las dos me resultan muy reconfortantes.
Puse todo mi empeño en cuidarlas a ambas como si fueran un tesoro. Poco tiempo después noté que el helecho y el bambú respondían de manera diferente a mis cuidados.
El helecho comenzó a brotar y en apenas unos meses se convirtió en una majestuosa planta que lo adornaba todo con su presencia. El bambú, en cambio, seguía debajo de la tierra, sin dar muestras de vida”.Pasó todo un año y el helecho seguía creciendo, pero el bambú no.
Sin embargo, no me dí por vencido, seguí cuidándolo con mayor esmero. Aun así, pasó otro año y mi trabajo no daba frutos. El bambú se negaba a manifestarse”. Prosiguió el anciano diciendo: “Tampoco me dí por vencido después del segundo año, ni del tercero, ni del cuarto. Cuando pasaron cinco años, por fin ví que un día salía de la tierra una tímida ramita. Al día siguiente estaba mucho más grande. En pocos meses creció sin parar y se convirtió en un portentoso bambú de más de 10 metros. ¿Sabes por qué tardó tanto tiempo en salir a la luz?”.El hombre pensó un momento, pero no supo qué decir.
El anciano volvió a tomar la palabra y le dijo: “Tardó cinco años porque durante todo ese tiempo la planta trabajaba en echar raíces; sabía que tenía que crecer muy alto y por eso no podía salir a la luz hasta tanto no tuviera una base firme que le permitiera elevarse satisfactoriamente. ¿Comprendes?”
El hombre entendió el mensaje. Comprendió que a veces las cosas demoran, porque están echando raíces.
Que lo importante es persistir y no perder la fe. Antes de despedirse, el anciano le regaló al hombre un mensaje para que lo guardara por siempre, el cual decía así: “La felicidad te mantiene dulce. Los intentos te mantienen fuerte. Las penas te mantienen humano.
Las caídas te mantienen humilde. El éxito te mantiene brillante”. Anónimo. ¿Eres capaz de superar la adversidad? ¿Eres capaz de sobreponerte a periodos de dolor emocional? En la vida todos en algún momento experimentamos alguna desgracia o sufrimiento, y esto es tan cierto como tristemente inevitable.
Ahora bien, dependiendo de la manera de cómo afrontemos estas dificultades que se nos presentan, podremos construir un futuro con más sabiduría, aprender de nuestro pasado y crecer. Cuándo la vida te lo pone difícil ¿Qué quieres ser? ¿Helecho o bambú?.
🙏A través de una fábula inspiradora, podemos conocer el poder de la resiliencia humana y/o cómo no sucumbir a las adversidades. La resiliencia humana puede definirse como la capacidad que tenemos los seres humanos para afrontar las adversidades, asumirlas con flexibilidad y, lo más importante de todo, salir fortalecido de ellas. ¿Y sabes algo mas importante? esta resiliencia puede ser aprendida. No es una característica intrínseca y exclusiva de determinadas personas, sino que todos y cada uno de nosotros podemos potenciarla y desarrollarla. Todos los seres humanos experimentamos dolor y sufrimiento, la clave está en convertir estas experiencias en virtud; de esta forma desarrollaremos nuestra resiliencia.💪SaludosFuerza y fe 🙏
Autor: Psic. Verónica Saenz